miércoles, 17 de febrero de 2010

Comenzamos el ciclo lectivo 2010


Tenemos el agrado de presentar los programas de capacitación diseñados para el ciclo lectivo 2010.
En esta oportunidad le presentamos algunas opciones de cursos  que han sido dictados  en los últimos 5 años con éxito en diferentes organizaciones.

Nuestra experiencia nos ha permitido poder ofrecer un menú amplio de formación de talentos humanos, en varias modalidades de cursado, diversas temáticas, duración y contextos. Realizamos desarrollos de formación  a medida de cada necesidad con la flexibilidad suficiente como para ser aplicable a diferentes clientes.


Los invitamos a visitar los listados, metodologías y más información sobre ellos.

Mil gracias

Marcelo 

Comenzamos el 2010 con grandes desafíos

El 2010 nos encuentra inmersos en una profunda crisis, donde tendremos la responsabilidad desde la gestión de las organizaciones de superar incontables desafíos, en esta oportunidad presentaré los que a mi criterio son los más importantes y a los cuales le dedico mi atención constante como profesional de las ciencias de la administración, como docente e investigador.

Gracias por su tiempo

Marcelo

Desafío I: Liderazgo
Superar el liderazgo que nos queda
Reflexiones de punto de partida

Desafío II: Gestión de la diversidad
¿Una oportunidad?

Desafío III: El Talento humano y organizacional
¿Fuente de generación de valor?

Desafío IV: Las TICs
Gestionar la tecnología de la información y la comunicación
¿El cambio de paradigmas?

Desafío V: El futuro en diferentes entornos E1, E2 y E3 2015 - 2025
Superar la grieta 2015 - 2025

Desafío I
Superar el liderazgo que nos queda
Reflexiones de punto de partida

Dedicado a las madres y abuelas de plaza de mayo.


Madre tu hijo no ha desaparecido. Madre yo lo encontré andando conmigo. Ismael Serrano.

¿Por qué estamos donde estamos?

Siglo XX cambalache problemático y febril, el que no llora no mama y el que no afana es un gil dale que va ¡!! Dale nomás que allá en el horno se v´amo a encontrar…” con estos versos y melodías nos iluminaba Enrique Santos Discepolo a mitad del siglo XX, como quien en un grito desesperado intenta anticipar el futuro y prevenirnos de posibles dolencias. Mismos versos recogidos, renovados, fusionados al acento catalán nos concedía Joan Manual Serrat en sus canciones, machacando con la misma poesía para despertar nuestra conciencia social, sin aparentes resultados positivos. Y fue así nomás, una fotografía anticipada de un siglo cargado de controversias, idas y venidas incomprensibles en casi toda su extensión. Ahora, estamos cerrando la primera década de un siglo XXI aún más desconcertante, impredecible y vertiginoso.

Los mismos conceptos parecen cargar la tinta de Zigmung Bauman y su teoría social liquida, quien con agudeza literaria desnuda los escándalos más despiadados de un sistema individualista y consumista en exceso. Pero estas mismas ideas aparecen en casi todo el legado de Peter Drucker y la sociedad post capitalista augurando la entrada a la sociedad del conocimiento.  Toda una paradoja, sea esta cuestión un absurdo, extravagancia, rareza, incongruencia o humorada del destino la cosa es así, entramos a la sociedad del conocimiento con miles de deudas sociales y de todo tipo.

El comunismo marxista fracasó, el capitalismo industrial fracasó, el capitalismo financiero está fracasando.

Vemos con parálisis ideológica como la China comunista encabeza el ranking de libertad económica mundial y Estados Unidos compra acciones de bancos y automotrices interviniendo en el mercado al mejor estilo Keynesiano. Leemos artículos que aseguran los beneficios de la gestión de la diversidad en las organizaciones modernas occidentales y en medio oriente aún matan a pedradas a las mujeres que la justicia haya adulteras. Las diferencias sociales, culturales, ideológicas y económicas son cada vez más heterogéneas, generando en algunos casos asimetrías y brechas tremendas globalizando la pobreza.

En Argentina los procesos políticos, sociales y económicos parecen correr la misma suerte, con una historia reciente de cinco presidentes en una semana, un liderazgo frágil, estabilidad económica en riesgo constante, magras perspectivas de crecimiento y una joven democracia que lucha por consolidarse.

En este contexto los actuales y futuros líderes deben forjar nuestros destinos, el destino de sus organizaciones, sean estas públicas, privadas o del tercer sector.

Pero ¿Cómo son nuestros actuales líderes? ¿Cómo serán en un futuro? ¿Qué capacidades ponen en acción? ¿Qué prácticas se pueden obtener como exitosas, y cuales son desaconsejables usar? ¿Qué culturas organizacionales deberán forjar?¿Que valores humanos deberán construir?¿Que  estamos haciendo hoy por ellos?¿Argentina posee déficit de líderes?

Nuestra historia posee un hecho que puede explicar parte de este escenario de falta de líderes, y es la desaparición de 30 mil de ellos.
Pensando en eso me pregunto, que hubiera sido de nosotros como sociedad si ese genocidio no hubiese ocurrido, que hubiese sido de nuestras instituciones si ese almacigo de líderes no hubiese sido pisoteado por crueles criaturas inhumanas.

También pienso es sus madres y abuelas que con sus pañuelos blancos llenos de dolor nos han procurado un ejemplo en los últimos 30 años. Un ejemplo de paz, lucha, fuerza, perseverancia, firmeza, paciencia, convicción, amor, esperanza de justicia y confianza en utopías de tiempos mejores.
Trato de sospechar una línea imaginaria que une a estos valores centrales y enseñanzas de las madres con la sociedad actual y encontrar algunas respuestas que nos guíen hacia una sociedad más justa, solidaria, equitativa y sustentable. La respuesta parece hacerse rogar, esconderse, cerrarse y no dejarse descubrir.

Encuentro que debemos hallar la posibilidad de construir una sociedad de  igualdad de oportunidades para los futuros líderes, educación en valores humanos y contextos sólidos de desarrollo.

Los futuros líderes serán la respuesta. Pero, ¿cómo son? ¿Que estamos haciendo hoy por ello, y por ellos? Como será el 30001? Tendrá ese liderazgo que nos merecemos, o que creemos merecer como sociedad.

El primer desafío que tenemos como sociedad será generar espacios para la formación de líderes con valores humanos sólidos, honestos, íntegros, solidarios, perseverantes, con vocación de servicio, inspiradores  de responsabilidad social y ambiental, este desafío nos debe permitir superar el liderazgo que nos queda. Y nadie está exento de forjar soluciones para realizar esta empresa, desde la educación primaria y familiar hasta los actuales líderes en todos los ámbitos.


Mil gracias

En breve el desafío II